Otra actividad que resulta fascinante para los chiquitos de la casa es aprender a calcar. Una vez que descubren que pueden calcar no hay manera de detenerlos.
Hacer un calcado de objetos o texturas es muy fácil, para ello necesitaremos:
Materiales:
- Lápices de grafito, de colores o crayones
- Hojas en blanco
- Hojas de plantas, monedas, objetos texturizados (como peines, telas, mesas, el piso, etc).
El proceso de calcado es muy sencillo, sólo debemos colocar la hoja sobre la superficie a calcar y, cuidando de no moverla, colorear sobre ella. Lo que ocurre es que el lápiz de color colorea más fuerte sobre la superficie que sobresale y va dejando la impresión del objeto que está debajo.
El resultado serán impágenes como éstas
Una experiencia divertida para los pequeños de la casa...
Me despido con muuuchos besitos hasta la próxima entrada... Muaaacks...
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